“Me falló el tema de la fama. Fui una persona públicamente muy expuesta y eso me jugó en contra. Inclusive tuve un coqueteo con la política y no fue bueno. Desantendí a la empresa a veces por dedicarme a otras cosas. Tengo un gran defecto, no sólo la confianza, y creo que tienen la mayoría de los que hacen trading: el ego”, aseguró Edgar Bacchiani, el titular de Adhemar que se encuentra detenido desde hace más de dos años acusado de realizar intermediación financiera, defraudación, lavado de activos y asociación ilícita que en su última declaración denunció estar siendo víctima de una estafa.

“El Pelao” o “Trader God” comenzó a probar suerte con las criptomonedas en 2014. En 2018 comenzó a expandirse hasta que con la pandemia de 2020 pudo expandirse. Abrió un local en Catamarca y luego fue ampliando su base de operaciones abriendo sucursales en Tucumán y en Córdoba. También tomaba los capitales de ahorristas de Salta, Jujuy, Santiago del Estero, Buenos Aires, Mendoza y Santa Fe, entre otras. Era el tiempo en que circulaba por las calles catamarqueñas a bordo de una Ferrari.

“He aportado a gran parte de la sociedad catamarqueña una mejoría en su calidad de vida durante un tiempo prolongado”, dijo en una de sus últimas declaraciones. “Los inversores de Adhemar Capital han podido comprar lotes y construir sobre ellos, comprar propiedades ya construidas, han movilizado el parque automotor marcando récords, han salvado sus comercios en épocas de pandemia y han podido ampliar y crecer en sus rubros. En el sector gastronómico, se podía observar un nivel de consumo y doy fe de ello, porque no había mesas libres en ningún bar por donde uno transitaba”, declaró.

La caída

Pero su sueño y el de miles comenzaron a destruirse en octubre de 2021. El gobernador Raúl Jalil hizo pública una denuncia de que Adhemar Capital no estaba autorizada a realizar las operaciones financieras. A partir de ese momento, la gente dejó de tener confianza y hubo una corrida. A partir de enero de 2022, comenzó con la cesación de pagos. En marzo, la situación era insostenible. Protestas callejeras en Catamarca, lluvia de denuncias por estafas y el cierre de las sucursales derivaron en su detención en abril de 2022.

En la provincia a la que intentó transformarla, según sus propias palabras, en “la Babilonia del NOA”, fue procesado por el juez federal Miguel Ángel Contreras. En Córdoba, ante las sospechas que allí no sería investigado, la fiscala Valeria Rissi avanzó con la causa p or 50 estafas que se habían radicado en es provincia y pidió que Bacchiani fuera enjuiciado, planteo que está en veremos por la apelación que presentaron sus defensores y porque la Corte Suprema de Justicia de la Nación no resolvió aún una cuestión de competencia.

La justicia ordinaria de Catamarca sólo atendió los pedidos de quiebra por Adhemar Capital y la del CEO. Se presentaron 269 acreedores que reclamaron deudas por más de $4.000 millones, pero solo 178 pudieron acreditarlas y esperan la devolución de más de $1.100 millones.

Denuncia

Pero Bacchiani pateó el tablero en una de las últimas declaraciones. En la justicia federal denunció que sus allegados y socios de la empresa estaban sacando el dinero que tenía depositado en sus cuentas.

Acusó a los también procesados José Blas, Alexis Sarroca.

OTROS TIEMPOS. Bacchiani denunció a su ex, Garcés Russo, por estafa.

También comentó que el descalabro financiero también se originó por una maniobra en la sucursal de Córdoba. Según expresó en su declaración, Blas nombró a Donato como gerente y a Augusto García Alaimo (habría huido del país con varios millones de dólares y actualmente se encuentra prófugo) como encargado. “El dinero que ingresó en esa sucursal está desaparecido. No entró a las arcas de la empresa. Envíe a Blas para que me hiciera un informe, pero por lo visto me equivoqué de persona”, indicó en una declaración que para muchos suena a una de las tantas excusas que dio en los últimos tiempos.

“Todas estas personas han incrementado sus patrimonios en desproporción a sus ingresos. Admito que fue muy duro para mí asimilar todos estos acontecimientos, que son muy destructivos para mi persona, que son ajenos a mi voluntad, que siempre fue la de cumplir, la de pagar y a la cual no voy a claudicar”, destacó en otra parte de su declaración.

Adhemar pidió la quiebra e intentaría con eso aliviar su situación

“El Pelado” dio algunos números sueltos en su declaración. Contó por ejemplo, que los empleados señalaban a Blas y a Sarroca cuando había faltantes en la caja de entre U$S100.000 y U$S600.000, pero que él nunca les creyó y hasta llegó a sancionar a los que les informaban sobre esta situación.

Bacchiani también denunció que mientras él estaba detenido, su ex mujer, Blas y Sarroca siguieron operando para tratar de conseguir la mayor cantidad de dinero. “Siempre les dije a las autoridades que hicieran algo. Que no podía ser que en el arresto domiciliario a esas personas les hayan permitido tener acceso a dispositivos electrónicos. Ellos siguieron haciendo transacciones”, destacó,

El CEO de Adhemar puso como ejemplo lo que habría hecho su ex mujer. “A su nombre aparecieron numerosas y millonarias transferencias a su país de origen. De la nada surgieron pagarés firmados por Sarroca de $100 millones. En una charla que tuve, ella me contó que estaría por iniciar un negocio de minería junto a su primo en Venezuela. Por eso pido que se haga una investigación del actual patrimonio de toda su familia”, destacó.

Bacchiani, en sus tiempos de esplendor, era tentado por decenas de catamarqueños para que sea el socio capitalista de diferentes proyectos. Desde una fábrica de medialunas, pasando por la construcción de una disco y hasta emprendimientos inmobiliarios. “Desde que estoy detenido, con métodos extorsivos mis socios se quedaron con todo”, destacó. Entre las perdidas aparece un terreno con el que tenía previsto hacer 1.000 loteos y, según estimó, le generarían ganancias por $5.000 millones.

Las cifras que se conocen

5.500
Serían las personas que invirtieron en Adhema Capital.

269
reclamaron una deuda por más de $4.000 millones.

178
acreedores podrán exigir el pago de más de $1.200 millones.

91
se quedaron afueran y no podrán cobrar más de $2.700 millones,

$3.300.000 millones
tendría Bacchiani en una de sus cuentas.

3
sucursales tenía Adhemar en todo el país.

12
son los procesados por esta causa.

25
meses lleva detenido Bacchiani.

Tres frentes judiciales abiertos

El juez federal Miguel Ángel Contreras lleva adelante la investigación más importante del caso. Acusó a Bacchiani y a otras 11 personas de varios delitos.

La fiscala cordobesa Valeria Rissi, desoyendo al juez Contreras, pidió que Bacchiani sea enjuiciado por 50 estafas. Podría recibir una pena de hasta seis años.

La justicia comercial de Catamarca aceptó el pedido de quiebra de la firma que deberá abonar más de $1.100 millones. Queda definir el proceso del CEO.

Datos

- Adhemar Capital era una financiera que se dedicaba a hacer transacciones con criptomonedas.

- Nació en Catamarca, pero después tuvo sucursales en Tucumán y Córdoba. Operaba sin sede, en otras provincias.  

- Captaba dinero de ahorristas en pesos y dólares. Pagaba tasas de entre el 7 y el 20% mensual en colocaciones que duraban seis meses.

- Los problemas comenzaron en octubre de 2021. En enero se inició la cesación de pagos y en marzo estalló el escándalo.